¿Recordáis que hace unos días os comentaba como se acumulaban los cumpleaños en pocas semanas? Pues sigo en racha, esta vez le tocaba a mi suegra. Quería hacerle algo especial; sí, ya lo sé, siempre digo lo mismo, pero es cierto, me gusta inspirarme en cada una de las personas para las que cocino y, en este caso, con mayor motivo, por tratarse de alguien muy especial...
Hacía algunas semanas que había preparado uno con la misma forma para mi sobrina (sí, la de los Macarons) y decidí que era la mejor opción para mi suegra,no tenía mucho tiempo para experimentar, así que no tenía margen de error. Además, mi hijo Éric quería participar en la elaboración y me pareció un bonito detalle para su abuela, con más cariño,no lo podría hacer nadie. Al final, por problemas de tiempo, el día tiene 24 horas y mis niños tienen una vida deportiva intensa, solo pudo ayudarme con la decoración, pero a mí me fue de perlas. Pasamos a la receta,a ver qué os parece...
Ingredientes: (para dos bizcochos altos de 20 cm.)
6 huevos
2 vasos de leche
500 gr.de azúcar
500 gr. de harina
1 vaso de aceite de girasol
2,5 sobres de levadura química (Royal)
2 cucharadas de pasta de mandarina
Para el frosting de chocolate negro:
300 gr. de azúcar glas
60 gr.de cacao en polvo sin azúcar (yo utilicé Valor)
80 ml. de leche
100 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
Para el frosting de mandarina:
300 gr. de queso en crema tipo Philadelphia
150 gr. de azúcar glas
2 cucharadas de pasta de mandarinas o 150 gr. de mermelada de mandarina o naranja
100 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
Para el almíbar de calado:
un vaso de azúcar
medio vaso de agua
medio vaso de narancello(se puede prescindir de él, pero entonces habrá que duplicar la cantidad de agua, o cambiar por otro licor, Cointreau, por ejemplo)
Unas perlas de azúcar para decorar
Elaboración:
1) Encendemos el horno a 180º.
2) Engrasamos los moldes que vayamos a utilizar, en mi caso, dos de 20 cm.
3) Separamos las yemas de las claras y montamos estas últimas a punto de nieve y reservamos.
4) Batimos las yemas junto con el azúcar y echamos la leche, el aceite y la pasta de mandarinas.
5) Añadimos la harina y la levadura tamizadas. Batimos lo justo para integrar.
6) Distribuimos la masa de manera equitativa en los moldes y horneamos durante 45 minutos aproximadamente (como siempre, dependerá del horno)
7) Una vez hechos, sacamos y dejamos enfriar antes de desmoldar.
8) Mientras, preparamos las cremas. Empezamos por la de chocolate. Ponemos todos ingredientes en un bol y mezclamos con unas varillas hasta que todos los ingredientes queden integrados. Reservamos en la nevera.
9) Ahora la de mandarina, comenzamos batiendo la mantequilla, añadimos el azúcar y, cuando veamos que la masa es cremosa, añadimos la pasta de mandarina y el queso en crema. Batimos hasta que todo quede integrado (unos 5 minutos aproximadamente). Reservamos en frío.
Montaje:
1) Ponemos un poco de crema de chocolate en la base donde vayamos a montar la tarta y colocamos uno de los bizcochos encima (el menos vistoso).
2) Hacemos el almíbar poniendo al fuego primero el narancello hasta que se evapore el alcohol, y luego, el agua y el azúcar hasta que se reduzca y espese.
3) Pincelamos generosamente la cara de cada bizcocho que vaya a estar en contacto con el relleno.
4) Ponemos una capa de crema de chocolate encima y distribuimos bien, no importa si sobresale por los lados, ya que luego la cubriremos toda.
5) Colocamos el otro bizcocho encima con cuidado, procurando que encajen bien uno encima del otro y queden rectos.
6) Aplicamos una capa de crema de chocolate por toda la tarta intentando que quede lisa.
7) Con la ayuda de un tenedor, hacemos unas líneas de abajo hacia arriba a modo de tallos de las rosas en el lateral de toda la tarta.
8) Refrigeramos, al menos, media hora.
9) Sacamos de la nevera y procedemos a hacer las rosas. Para ello seguiremos las indicaciones que os di en los cupcakes de fresa: meteremos la crema de mandarina en una manga pastelera con boquilla de estrella cerrada (la mía, 1M de Wilton)
10) Comenzamos por la parte de fuera, presionamos un poco la manga para que salga la crema y vamos girando la mano ( a mí me gusta hacerlo en contra de las agujas del reloj, pero en realidad, es igual) y formamos las rosas. Es importante hacerlas más o menos del mismo tamaño. Cubrimos toda la parte superior con las rosas y acabamos adornando con unas perlas de azúcar (opcional).
Aquí os dejo con el resultado, yo me voy a pensar en otras recetas, tengo un par de cumples más a la vista. Espero que disfrutéis de esta tarta tanto como lo hicimos nosotros;)
3) Separamos las yemas de las claras y montamos estas últimas a punto de nieve y reservamos.
4) Batimos las yemas junto con el azúcar y echamos la leche, el aceite y la pasta de mandarinas.
5) Añadimos la harina y la levadura tamizadas. Batimos lo justo para integrar.
6) Distribuimos la masa de manera equitativa en los moldes y horneamos durante 45 minutos aproximadamente (como siempre, dependerá del horno)
7) Una vez hechos, sacamos y dejamos enfriar antes de desmoldar.
8) Mientras, preparamos las cremas. Empezamos por la de chocolate. Ponemos todos ingredientes en un bol y mezclamos con unas varillas hasta que todos los ingredientes queden integrados. Reservamos en la nevera.
9) Ahora la de mandarina, comenzamos batiendo la mantequilla, añadimos el azúcar y, cuando veamos que la masa es cremosa, añadimos la pasta de mandarina y el queso en crema. Batimos hasta que todo quede integrado (unos 5 minutos aproximadamente). Reservamos en frío.
Montaje:
1) Ponemos un poco de crema de chocolate en la base donde vayamos a montar la tarta y colocamos uno de los bizcochos encima (el menos vistoso).
2) Hacemos el almíbar poniendo al fuego primero el narancello hasta que se evapore el alcohol, y luego, el agua y el azúcar hasta que se reduzca y espese.
3) Pincelamos generosamente la cara de cada bizcocho que vaya a estar en contacto con el relleno.
4) Ponemos una capa de crema de chocolate encima y distribuimos bien, no importa si sobresale por los lados, ya que luego la cubriremos toda.
5) Colocamos el otro bizcocho encima con cuidado, procurando que encajen bien uno encima del otro y queden rectos.
6) Aplicamos una capa de crema de chocolate por toda la tarta intentando que quede lisa.
7) Con la ayuda de un tenedor, hacemos unas líneas de abajo hacia arriba a modo de tallos de las rosas en el lateral de toda la tarta.
8) Refrigeramos, al menos, media hora.
9) Sacamos de la nevera y procedemos a hacer las rosas. Para ello seguiremos las indicaciones que os di en los cupcakes de fresa: meteremos la crema de mandarina en una manga pastelera con boquilla de estrella cerrada (la mía, 1M de Wilton)
10) Comenzamos por la parte de fuera, presionamos un poco la manga para que salga la crema y vamos girando la mano ( a mí me gusta hacerlo en contra de las agujas del reloj, pero en realidad, es igual) y formamos las rosas. Es importante hacerlas más o menos del mismo tamaño. Cubrimos toda la parte superior con las rosas y acabamos adornando con unas perlas de azúcar (opcional).
Aquí os dejo con el resultado, yo me voy a pensar en otras recetas, tengo un par de cumples más a la vista. Espero que disfrutéis de esta tarta tanto como lo hicimos nosotros;)
Sandra
Hola Sandra, soy Lidia, me encanta tu blog!!!!!! He tenido la suerte alguna vez de ser uno de tus dragones, espero poder serlo muchas veces más. Un besazo
ResponderEliminarQué ilusión, Lidia!! Mi primer comentario en el blog y es tuyo!!!!!! Me alegro que te guste y cuenta que tanto tú como los tuyos siempre seréis dragones VIP en mi casa, igual que nosotros somos en la vuestra (ya lo digo yo!). Besos.
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